Las toallas son un elemento indispensable en nuestros hogares.

Además de su función principal, la higiene personal, en su elección influyen también otros factores que tienen que ver con nuestros gustos y con el uso que se les va a dar.

Sin olvidar su función meramente decorativa ya que las toallas son una parte fundamental en la decoración de los cuartos de baño.

A la hora de elegir las toallas hay que tener varios factores en cuenta. Lo primero es la calidad que necesitamos. No es lo mismo elegir una toalla para ir al gimnasio que una toalla para el uso diario en nuestro hogar. Tampoco requiere la misma calidad una toalla para nuestros pequeños de la casa, que una toalla para completar el baño de una casa rural.

Las dos variables más importantes que influyen en la calidad de las toallas son, su composición y su grosor.

Las toallas tradicionalmente están fabricadas con algodón, siendo el algodón Egipcio y el algodón Pima de origen peruano los de mejor calidad, con una suavidad y resistencia al uso inigualables. También hay algodón producido en China, India y EEUU, y que dan buen resultado con una gran calidad, mucho más frecuente en todo tipo de productos y un poco más económico.

El grosor de las toallas se mide en GSM, gramos por metro cuadrado. Cuanto más grosor tenga más aumenta su capacidad de absorción y su durabilidad. A partir de los 450 gr/m estamos hablando de una buena toalla. Las toallas para nuestra casa, para nuestra familia, no deberían tener menos grueso, esto nos asegurará su suavidad y confort durante muchos años de uso. Una toalla de 500 gr/m con un algodón de calidad no se rompe nunca. La cambiaremos el día que nos aburramos de verla o cuando los lavados empiecen a notarse en los colores que con el tiempo pierden fuerza y dan aspecto viejo, pero la toalla seguirá secando y tendrá la suavidad del primer día.

En los establecimientos de hostelería es difícil encontrar toallas de 500gr/m a no ser que sean establecimientos de alto nivel. Nosotros aconsejamos que no tengan más de 350 o 400 gr/m. Esto es así por dos motivos, el primero el económico, son toallas más baratas y el mal uso es frecuente, incluso su desaparición también es frecuente.

El segundo es un motivo importante que tiene que ver con la ecología y el medio ambiente. Las toallas de un hotel se lavan prácticamente cada día, y la cantidad de jabón agua y luz que se utiliza para su lavado en menor en caso de que sea una toalla fina, esto reduce el consumo y la cantidad jabón que se vierte a las alcantarillas, aunque la toalla seque un poco menos, en mi opinión, esta ventaja supera el inconveniente.

Para viajar y el gimnasio lo mejor son las tollas de microfibra, toallas fabricadas con fibras acrílicas. La principal diferencia con las de algodón es que son mucho más finas y no ocupan nada en la maleta, además tienen otra ventaja importante, se secan muy rápido, lo cual en un gimnasio es muy recomendable porque dificulta que aniden los numerosos gérmenes que habitan por los vestuarios siempre con un nivel alto de humedad y con un gran trasiego de personas.

Si queréis saber más sobre las toallas de microfibra podéis leer esta entrada de nuestro blog que colgamos hace un par de años: Toallas de microfibra

Espero que este artículo les haya servido de utilidad. En todo caso si tienen cualquier duda o comentario nos lo pueden hacer llegar y les contestaré con mucho gusto.

Un saludo

Javier Castaño